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MUERTE EN EL NILO

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

Muerte en el Nilo es una película británica de 1978 dirigida por John Guillermin, con Peter Ustinov en el papel principal...La película está rodada en Egipto, y en su mayor parte a bordo de un barco de vapor en el río Nilo. Muchos de los lugares de interés cultural de Egipto también se muestran en la película, como las grandes pirámides, la Esfinge y los templos de Abu Simbel y Karnak. Basado en la novela policíaca homónima escrita por Agatha Christie, su estreno mundial fue el 6 de octubre de 1978. Anthony Shaffer escribió el guión intentando evitar en la medida de lo posible reproches . En primer lugar despojó a la adaptación de los tintes colonialistas que impregnaban la novela  que justificaban la existencia del Imperio Británico, pues era consciente de que en 1978, 18 años después de la celebración de la Conferencia de Bandung, cualquier ficción que subrayase la superioridad de la cultura occidental sobre otras estaría llamada a generar polémicas. En un mismo sentido, y en colaboración con el actor Jon Finch, reportó dignidad al personaje marxista de la novela, con el cual se cebaba la autora con una gran cantidad de vicios. En segundo término, procedió a eliminar personajes: el italiano Richetti, la señora Allerton y su hijo Tim, la sobrina de la señora Van Schuyler Cornelia Robson... De esta manera se reduciría el número de interrogatorios efectuados por Poirot. Ahora bien, para evitar que éstos no fueran acusados una vez más de mecánicos introdujo con ayuda del realizador John Guillermin y el compositor Nino Rota, elementos de tensión.

 
 

 

 

En tercer lugar, Anthony Shaffer sabía que había que extraer interés dramático. Si Asesinato en el Orient Express versaba sobre la culpabilidad colectiva de una sociedad, Muerte en el Nilo ofrece tres niveles de discurso. El primero, esbozado por José María Latorre en un artículo, recae sobre el poder de la vida y que se establece desde el momento en que Poirot alza la vista a una esfinge egipcia que parece observarle. A lo largo de la película Poirot asistirá a los momentos claves de la trama. El segundo le era muy querido. Aprovechando el carácter egoísta de la asesinada, Shaffer habló sobre las diferencias de la clase y las relaciones de dominación. Linnet, a lo largo de la función, calumnia a un médico alemán, el Doctor Bessner que no puede permitirse ningún escándalo relacionado con su clínica; demanda a una escritora alcoholizada Salómé Otterbourne  por escribir una novela erótica inspirada en su figura; prohíbe a su criada Louise dejar su empleo para reunirse con su amante egipcio... Un carácter dominante y expeditivo que heredó de su padre, que arruinó a la familia de la señorita Bowers, forzándola a servir como enfermera. Ahora bien, a pesar del esfuerzo de Shaffer en la escritura de guión, varios especialistas consideran a Muerte en el Nilo como una película de equipo. Así por ejemplo José María Latorre en su libro Nino Rota: la imagen de la música señalaba que el trabajo del compositor giraba sobre tres direcciones:

 

1) componer temas de inspiración egipcia,

2) resaltar la influencia del paisaje sobre los personajes,

3) crear un clima plagado de presagios.
 

 

 

 

En un mismo sentido la labor fotográfica de Jack Cardiff procuraba resaltar el pasado histórico del país, primando los colores amarillos y azules, para sobrecoger a las criaturas ideadas por Christie. Asimismo el trabajo de John Guillermin se caracterizó por cierto sentido de lo atmosférico,. los travellings que relacionan el vapor con la tierra- y del detalle a un camarero del barco se le cae una toalla al suelo y cuando la recoge la encuentra bañada en sangre-. La crítica especializada siempre ha destacado su reparto plagado de estrellas. Peter Ustinov heredó el papel representado antes por Albert Finney, una vez que éste se negase a someterse a las duras sesiones de maquillaje bajo el sol. John Guillermin le encomendó expresar las vacilaciones de Poirot, reproduciendo sus dudas y sus procesos mentales con la mirada. Bette Davis, el día antes de rodar con él, no pudo dormir porque sentía hacia el intérprete muchísima admiración. Al mismo tiempo Ustinov se quedó desvelado, abrumado por compartir el encuadre con  Bette.

 

 

 

Para el rodaje de la película necesitaron un total de ocho semanas, cuatro a bordo del vapor Karnak y las otras cuatro en lugares como Asuán, Abu Simbel, Luxor y El Cairo. Como curiosidad, se empezaba a maquillar y peinar a los actores y actrices del reparto en plena noche de 4.00 a 6.00 de la madrugada para no tener que soportar las temperaturas de más de 50º  cuando llegaba el mediodía. Durante el rodaje surgieron varios problemas porque se habían efectuado reservas hoteleras para la tripulación. Posteriormente fueron trasladados de hotel en hotel, a veces a diario. Al director John Guillermin nunca se le permitió ver a los actores. Por orden de los productores, el largometraje fue enviado directamente a el una vez acabado a Londres. La película recibió críticas  positivas, con una aprobación del 80%. No obstante, se la comparó con su predecesora Asesinato en el Orient Express, también basada en la novela literaria de Christie. La película recaudó 14.560.000 de dólares, por debajo de los 25.000.000 de dólares que consiguió Asesinato en el Orient Express cinco años atrás. “Muerte en el Nilo” era una película que se esperaba con ansías en 1978, por varios motivos. Hacia dos años de la muerte de Agatha Christie y el cine tenía que rendir su homenaje, además cuatro años en 1974, “Asesinato en el Oriente Express” había sido un éxito absoluto y la gente esperaba más del estilo. A lo que hay que sumar que las películas con multitud de caras famosas estaban de moda en los setenta y por tanto todo estaba a favor de su producción de la que se encargaron los mismos que de la Oscarizada adaptación. Pero había un problema, Albert Finney, el anterior Poirot, no soportaba las altas temperaturas de un rodaje en Egipto, lo que hizo que rechazara la propuesta. Y el actor Peter Ustinov, a mi juicio el mejor Poirot de todos los tiempos, que en su primera -y mejor- aparición hizo olvidar a Finney.... La historia en sí, es como casi todas las novelas de la señora Christie, es decir, muy mecánicas, sin embargo tiene un desenlace bastante más trabajado que en otras ocasiones. Además el marco incomparable de un crucero por el Nilo, con algunos de los monumentos más importantes del mundo, hacen de ella un documental turístico, del que Jack Cardiff, obtiene una fotografía de gran belleza. Al igual que los decorados y los vestuarios que ganó el Oscar de la mano de Anthony Powell y que serán siempre recordados. Hay muchas anécdotas en el rodaje de este film, entre ellas, la veneración que sentía Ustinov por Bette Davis, que le hacía ponerse nervioso en las secuencias que compartían...Destacar incluso hasta el doblaje en español, que es uno de los mejores de la época y un trabajo de calidad.

 

 

Soy un gran fan de Agatha Christie, sus libros me parecen sensacionales, aunque su autora era una señora insoportable, de la más rancia tradición británica, colonialista desacerbada...la película oculta el verdadero sentido del libro..., racista consumada y anticomunista visceral que no cerebral, al marxista en la novela se le presenta como lo peor, en definitiva una de esas plumas que contribuyeron a justificar el Imperio Británico y su control del mundo. No importan los años que hayan pasado, no importa las veces que me los haya leído, los acertijos en forma de novelitas de Agatha Christie siempre consiguen engañarme y al final, cuando llega la resolución y averiguo por fin quién era el asesino, me quedo pasmado por la facilidad con la cual esta señora me ha vuelto a hacer trampas. Y eso me entusiasma. "Muerte en el Nilo" es la adaptación cinematográfica de "Poirot en Egipto" y como su nombre indica, presenta al orondo detective belga en plácidas vacaciones por los dominios de Ra, tan sólo interrumpidas por la desagradable irrupción de un asesinato bastante inoportuno. Todo lo demás sigue a rajatabla las reglas de la novela hasta una resolución final casi imposible de averiguar, como suele ser habitual en el caso de las historias de Christie. Lo mejor de la película, aparte de la ambientación de época (muy glamurosa) y los actores, es su carácter casi interactivo y es imposible resistirse a su implícita invitación a incorporarse al viaje y jugar a los detectives junto al genial Poirot. Buena adaptación que entretiene, divierte, sumerge y deleita, con bonito despliegue de paisajes egipcios y Ustinov como el mejor Poirot que he visto en pantalla. Recomendada.

 

 

 

Muerte en el Nilo se ha convertido con el paso de los años en un clásico del cine de suspense. Basado en la novela de Agatha Crhistie con el mismo título, cuyo protagonismo es el célebre personaje; Hércules Poirot. Con un reparto excepcional de grandes actores británicos y estadounidenses, todos destacan en sus respectivos roles: Peter Ustinov hace un papel genial, su enorme trabajo como el detective Hércules Poirot solamente se puede describir con halagos, el resto del reparto son veteranos con un calidad interpretativa indiscutible; David Niven, Angela Lansbury, Bette Davis, Mia Farrow o George Kennedy, en definitiva, un reparto de lujo. El magnífico escenario de la mayor parte de la trama; Egipto, sobretodo en el Karnak, barco que transcurre por el Nilo, es perfecto para una trama con un crimen, un lugar misterioso y pequeño con muchos personajes, cada uno con los suficientes motivos para asesinar y que gracias a un espléndida secuencia inicial iremos conociendo. La atmósfera es espléndida, con un aroma clásico entre las ruinas egipcias, un lugar que fascina. Uno de los detalles que más resalta la película es su montaje, característica de la literatura con la visión y posibilidades de que el asesinato sea ejecutado de formas distintas con un asesino para cada ocasión, como si de un puzzle se tratase, con un moldeado perfecto que engaña al espectador, con la imposibilidad de anticiparse a los acontecimientos. En resumen.... "Muerte en el Nilo, es una obra maestra, un cine ejecutado a la perfección con un reparto que ofrecen un enorme trabajo interpretativo, un guión de hierro adaptando una gran novela de una de las mejores escritoras del género. Extraordinaria intriga en la película en la que, por primera vez, Peter Ustinov encarnó con gran acierto al literario detective belga Hércules Poirot. En comparación con "Asesinato en el Orient Express" "Muerte en el Nilo" es muchísimo mejor, pese a contener elementos parecidos en el planteamiento de la trama: Un viaje, el casual encuentro de Poirot con otro amigo suyo y que todos los pasajeros tengan un motivo.... para cometer el crimen.

 


 

Aunque pueda parecer algo larga, al final de la cinta comprendes que no sobra ni falta nada. Tres momentos, imprescindibles en el argumento, marcan el desarrollo perfecto de la película:


1) Conocer detalladamente a cada uno de los que más tarde serán sospechosos: Su personalidad, vida y, sobre todo, relación con la asesinada.


2) Reconstruir cómo pudo cada uno de ellos ser el culpable, a fin de no poder excluir a nadie con tanta facilidad.

3) La rápida solución del misterio por parte de Poirot, trabajando sin descanso la "materia gris" La mejor escena es, aparte de la resolución del caso, el amago de ataque de la cobra a Poirot.


Eso sí, no puedo creerme del todo que permitieran a los turistas subir así como así a las pirámides de Gizeh, casi como una excursión en la que apenas se despeinan ni sudan pese al esfuerzo y el sofocante calor del desierto. Esta película posee todos los cliches que puede tener una película de misterio policial: “todos los viajeros tienen una razón para cometer el crimen”. Pese al cliché y lo plano de los personajes (parecen unidimensionales) la película es muy entretenida. El misterio se mantiene en una fórmula que hoy en día se ha copiado mucho a Agatha Christie: se presentan todos los personajes y sus motivos, en el trayecto se presentan sin que nadie lo note la claves para resolver el crimen y luego los junta a todos para develar el misterio en una deducción que nadie pudo haber logrado salvo el detective.

 

 

 


Mención aparte merece el excelso reparto, junto con la música de Nino Rota, la fotografía de Jack Cardiff, la dirección artística de Ackland Snow, el vestuario de Anthony Powell y la elegante realización de John Guillermin .Sin duda una obra bien dirigida sabiendo adaptar bastante bien la obra original de una de las escritoras claves de la novela criminal. Con un reparto de lujo y una dirección correcta la película nos va adentrando en la historia de este asesinato. Lo mejor de este tipo de cine es que sabe mantener al espectador pensativo y en atención profunda durante todo el film. Estas películas tienen una técnica común, todo espectador ha de saber encontrar al asesino y todos sabemos que serán aquellos que menos esperamos pero todo el rato caemos en la trampa y nunca damos con el asesino correcto hasta que no se nos desvela hasta el final...Esto está bien logrado y eso se debe a una buena dirección, el director sabe que momentos captar y cuales guardar para el final, con un fin, descentrarnos por completo y darnos la sorpresa al final de la película, considero que no es un trabajo fácil y creo que en esta película está bastante bien logrado. El reparto, de lujo, tenemos a una mayor Bette Davis que se comerá la pantalla con su mirada salvaje y resulta una gran aportación a esta película. Siempre he dicho que Bette Davis fue una gran amante de su profesión y supo adaptarse a los nuevos cambios que el cine iba ofreciendo, sin duda, una de las mejores actrices de todos los tiempos. Es un clásico del cine criminal que hasta hoy se sigue viendo con placer para aquellos que todavía no sabíamos quienes eran los asesinos.

 

 

 

 

Las imágenes nos transportan a un lujoso crucero en un barco fluvial por el río Nilo. Paradas estudiadas para ver pirámides y templos y regresar al barco antes de que el calor apriete; cómodos y amplios camarotes, comedores suntuosos, gente elegante y bien vestida, trajes de diseño para ellas y smoking para los caballeros. Por ello ganó el Oscar al mejor vestuario del año 1978. Nada que ver con los actuales cruceros en barcos gigantes y viajeros en zapatillas y pantalones cortos. Al recorrido por el Nilo se añade un par de asesinatos que el inspector Poirot  logra descubrir con la colaboración de un sagaz abogado que interpreta David Niven. Por cierto que Poirot reivindica en varias ocasiones su nacionalidad belga. "No soy francés señora, soy belga" . Buen viaje a los que animen a ver la película. El Nilo está esperando. Eso sí, hay que ir correctamente vestido. Nada se puede reprochar a la adaptación de John Guillermin de la novela de la maestra del suspense Agatha Christie. Tiene una tensión constante, está espléndida y muy especialmente tiene un reparto glorioso. Peter Ustinov,, Bette Davis, Angela Lansbury, Mia Farrow, Maggie Smith, Jane Birkin, Simon MacCorkindale...Una película prácticamente perfecta para disfrutar de un enorme relato de suspense en el incomparable marco natural del Egipto clásico para espectadores que quieran ser sorprendidos y jugar a los detectives mientras disfrutan de un trabajo muy bien hecho. Pulcritud y elegancia británica en todo su esplendor.

 

 

 

 

Es muy improbable que el asesinato fuera improvisado luego el único que puedo acceder a la pistola es el propio herido que lógicamente habría simulado el disparo o el daño que le provocó éste. No te importa ningún personaje pero es un poco como jugar al ajedrez. Está genial Poirot ("mesié puerro" como le llamaba la Langsbury. Los vestidos de todas eran tan maravillosos, que costaba concentrarse!. Qué época debió ser aquella!.La Davis cumplió pero para mí que ya no estaba mas que para arrastrar encajes por la cubierta Ahora la criada de ella que ahora no me sale el nombre... la amo. Maggie Smith!, Está sembrada además. Buenísima. Es maravillosa!. Cuando ella aparece, las escenas triplican su interés. Si pierdes a uno de los mejores jugadores del equipo, hay que estar dispuesto a rascarse el bolsillo para planificar la temporada siguiente. Sin Albert Finney para ejercer de Hércules Poirot, la producción británica embarca al elegante Peter Ustinov, perro viejo de olfato fino. Importante reto para John Guillermin el lidiar con un casting de tremendas estrellas para adaptar un nuevo relato de la gran dama del misterio en la literatura, Agatha Christie. Además, el espectro del gran Lumet estaba todavía presente. De cualquier modo, logra una cinta armoniosa y exquisita, siendo un goce para el espectador al poder disfrutar de la elegancia de nombres como Angela Lansbury, Mia Farrow o David Niven,
La fotografía de Jack Cardiff es completamente exquisita, además de disponer de unos decorados cuidados hasta el más mínimo detalle por Anthony Powell. No es "Asesinato en el Orient Express" pero resulta una secuela de calidad extraordinaria que enriquece el mito del detective belga. Asimismo, nos presenta un crimen fascinante que apela a las emociones humanas más básicas (el desamor, la codicia, la venganza, etc.). Simplemente, no podemos pedir más para el género. Encantador y absorbente viaje por el Nilo.

 

 

Como fan de la novela de misterio, no he dejado de leer ningún libro de Agatha Christie. Una mujer extraña, apasionante, y una gran novelista de su época. Las adaptaciones cinematográficas de sus obras, como es en este caso Muerte en el Nilo, parecen como partidas de Cluedo, aquel famoso juego de pistas que se basaba en: quién fue el asesino, dónde, con qué, y porqué. Con un elenco de grandes artistas, la trama se va desvelando, ..

Es una obra maestra que ningún mitómano debe perderse, porque es el resultado de una película única.